Tenerla sobre mi y encima besándome es algo que nunca en la vida
pensé que iba a suceder pero si, ahí estaba ella sentada en mis
piernas besándome. Capaz parezca un poco rápido pero para mi no lo
es, hace cinco meses, tres días, dos horas y bueno.. los minutos y
segundos exactamente no los se en este momento ya que no sabia muy
bien la hora, que nos conocimos y si pasara algo mas tampoco seria
muy pronto, creo.
-Pau -le dije intentando de que me dejara de besar- eu.. basta.
-¿Por que? ¿Que pasa?
-¿A vos no te parece que si seguimos así todo se nos va a ir de las
manos?
-¿Y?
-¿Como y? Nosotros no somos nada.
-¿Que tiene? Eso no quiere decir que entre nosotros no pueda pasar
nada. A parte vos me queres, o no?
-Si, pero..
-Pero nada -interrumpió- ¿tenes miedo? -dijo y rió.
-¿Miedo? -largue una pequeña carcajada- ¿vos te pensas que voy a
tener miedo?
-¿Y entonces cual es el problema?
-Ninguno.
-Tanto lío para nada. ¿A vos no te gustaría que se nos vaya de las
manos? -sonríe.
-Sigamos con la novela -dije e hice que ella se levante de mis
piernas.
-Sos un tarado, después no vengas a apurarme y decirme que no tenes
sueño para intentar de lograrlo.
-No te enojes boba. Es que siempre espere ese momento, de verdad y
ahora lo veo tan cercano.
-Y lo alejas cada vez mas y mas.
-Prometo no hacerlo mas.
-Ya no importa, ahora seguimos con la novela.
Le mostré lo poco que escribí y de paso lo leí, pero no tenia
mucho sentido lo que había puesto.
-Dejame a mi, yo voy a explicar lo que paso -dice agarrando la
computadora.
Me senté en la silla frente a la
computadora y empecé a pensar en una historia para escribir, quería
escribir una novela, una novela con pocos capítulos pero
interesante, que cautive a la gente y quiera mas y mas. Miles de
ideas pasaban por mi cabeza, empezaba a escribir pero al poco tiempo
borraba lo que había escrito. No podía seguir así, no estaba
totalmente concentrado, Paula comenzaba a aparecer en mis
pensamientos y esos pocos momentos que pasamos juntos.
Me levante de la silla y fui hasta
la cocina a prepararme un café, mire por la ventana y ahí estaba
ella, hermosa como siempre, perfecta.
Corrí hacia la puerta y la abrí gritando su nombre para que no
se aleje, se bajo de su bicicleta y se acerco a mi. Al sentir sus
brazos rodeándome me agarro como una especie de escalofríos, algo
que ya había pasado hace unos días.
-Por lo que habías escrito,
así iría mejor -dice sonriendo- ¿te gusta?
-Quedo bueno, se nota que te gusta escribir.
-Algún día voy a mostrarte algo que escribí hace mucho, tengo las
hojas en mi casa.
-Ah. ¿Queres merendar? Ya es hora -dije y me pare.
-Como vos quieras -se paro y se dirigió hacia la cocina.
Prepare la merienda para los dos.
Mientras prendí la tele de la cocina. Mi casa era demasiado grande
para mi solo pero eso me permitía invitar gente o quizás en algún
futuro esta casa sea en la que viva con mis hijos.
Sigan la nove al costado del blog. Comenten acá o en mi twitter
@Love_PauChaves.
subí más!!!
ResponderEliminar